29 de octubre de 2013

Los primeros "cachitos"

  1. En enero de este año, con este blog aún en pañales, se le ocurrió crear esta sección a la autora del primer "cachito".  
    Abrimos la veda -decía su creadora- para que en los comentarios de esta entrada haya fragmentos de texto, microrrelatos, citas o lo que apetezca.

    El único requisito es que aparezca la procedencia, preferentemente en plan referencia bibliográfica y así matamos dos pájaros de un tiro: leemos el "cachito" y nos entran ganas de ver el resto.

    ¿A qué estamos esperando?
     
    Queremos recordar aquella primera edición  publicando de nuevo los comentarios que en ella aparecieron para que os animéis a dejar aquí  la huella  que  os  han dejado  vuestras lecturas.
     
     
    "La nueva hermeneútica puede dar al traste con todo"

    ABRAHAM: Heme aquí, Señor, en la tierra de Moriah exactamente en el monte que indicaste. Está afilado el cuchillo escrupulosamente; apenas va el niño a enterarse.

    ANGEL DE YAHVÉ (para sí): Cada día estoy más convencido: tiempos son estos de fantasmagorías y superstición.

    VOZ: Soy el ángel de Yahvé. Detén tu mano, Abraham. Porque ahora he visto que en verdad temes a Dios, pues por mi no has perdonado a tu hijo, tu unigénito.

    ÁNGEL DE YAHVÉ (con los ojos como platos): ¿De quién es esa voz...? Oh, Señor; nadie me va a creer cuando cuente esto.

    ABRAHAM: Así se hará, si ese es tu deseo; pero no sé si tiene mucho sentido habernos dado semejante caminata para esto.

    VOZ: Mira a tu espalda, Abraham.

    ABRAHAM: Sólo veo montes por todos lados, y un carnero, con lo cuernos enredados en la jara.

    VOZ: Ofrécelo en sacrificio, aunque sólo sea para aprovechar el porte.

    ABRAHAM: Ya puestos...

    EL CARNERO (aparte): Dirán que es una pregunta improcedente, pero es muy normal cuestionarse los hechos que le van a costar a uno el pescuezo: ¿Es la ventriloquia una gracia divina o un arte demoníaco?

    ÁNGEL DE YAHVÉ: Yo me voy de aquí; si le da a Dios por bajar, se me va a caer la cara de vergüenza ajena.

    ESCUDERO, Alberto, en "Antología del microrrelato español (1906 - 2011)", pp 246-247. Cátedra, 2012.

  2. ¡Qué cosa tan bonita! No pensaba yo que al abrir el blog de la biblioteca me iba a encontrar con algo así. Felicidades a quien corresponda, cuyo nombre no escribo por envidia.
    Ahí va mi aportación. Es un trocito de un poema de Kavafis:

    El joven poeta Eumenes
    se lamentó un día a Teócrito:
    "Llevo escribiendo dos años
    y solo he compuesto un poemita...
    Veo con tristeza qué alta
    es la escalera de la poesía" (...)
    A lo que Teócrito replicó: "Palabras como esas
    son impropias, blasfemas.
    Feliz y orgulloso deberías sentirte
    de estar en el primer peldaño.
    Lo que acabas de hacer es algo maravilloso. (...)
    Incluso ese primer peldaño
    es un largo camino para el mundo ordinario.
    Y tú ya eres, por derecho propio,
    miembro de la ciudad de las ideas"

    KAVAFIS, Constantino P; "Obra escogida" Barcelona, 1984

    PS: Después de esto me pregunto si podríamos pensar que el cordero parlante de la anterior entrada pertenece también a la ciudad de las ideas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario